El Maristas cae en su debut ante el Castelló (55-44)

El Maristas Coruña cayó en su estreno en la fase de ascenso a la Liga Challenge contra el NBF Castelló, en un partido muy igualado y que se decidió en los últimos minutos (55-44).

Después de un emocionante minuto de silencio por el fallecimiento de la entrenadora del Arxil, Maite Méndez, el encuentro empezó de la mejor manera para el cuadro herculino.

Con un diferencia de altura notable entre ambos quintetos, el Maristas sobrecargó la zona para que Andrea Pérez, que comenzó muy inspirada, anotase siete puntos casi consecutivos y dar así la primera ventaja a su equipo (2-8).

El técnico rival, Jaume Tormo, quiso cortar rápidamente esa sangría en la zona con un tiempo muerto. En él, abroncó a sus jugadoras para que hiciesen más ayudas sobre la interior pontevedresa y liberar a las exteriores, que empezaron negadas de cara al aro.

Sin embargo, su plan no funcionó, ya que el Maristas continuó dominando la zona, sólo que ahora era Marta Vulovic –que era duda para jugar– quien se benefició de su altura para castigar una y otra vez a la defensa castellonense (4-13).

No obstante, con la entrada de la segunda unidad de ambos conjuntos, el duelo se fue igualando hasta el punto de que el Castelló, que empezó a carburar, acabó a sólo seis puntos (13-19).

El segundo acto empezó de la peor manera para el Maristas. Cristina Villamor, una de las mejores jugadoras del cuadro entrenado por Tormo, despertó de su letargo y con 7 puntos consecutivos le dio la vuelta al partido, lo que obligó a Fernando Buendía a parar el partido (20-19).

Era el primer momento complicado para las coruñesas, pero por suerte emergieron Sendy Basaez y Vulovic para liderar un parcial de 4-11 que sirvió que el Maristas retomase la delantera (27-32).

El entrenador castellonense tuvo que volver a detener el duelo para tranquilizar a sus jugadoras, diciéndoles que aun quedaba mucho cuarto y que fuesen más incisivas de cara al aro.

Y era cierto, pues todavía restaban tres minutos para el descanso. Con todo, esa pausa cambió por completo el ritmo de juego de ambos conjuntos, ya que perdieron efectividad en ataque. En todo ese tiempo, sólo se anotaron 3 puntos que sirvieron para igualar un cuarto muy disputado (30-32).

Cambio de guion

Tras el paso por los vestuarios, ambas escuadras parecieron recuperar la puntería, especialmente el Castelló que anotó dos triples consecutivos (36-32), pero nada más lejos de la realidad.

Los errores en tiros liberados se sucedieron en ambos lados para desesperación de ambos preparadores. No fue hasta el ecuador del cuarto que el Maristas anotó su primera canasta, obra de una Marta Vulovic sobresaliente (36-34).

A ella, se le sumaron Carolina Arfinengo, que no tuvo su mejor partido en ataque, y Porri –segunda máxima anotadora el cuadro herculino–. Con ellas acertadas, el conjunto entrenado por Fer Buendía retomó el mando a falta de dos segundos para finiquitar el cuarto (38-40).

Sin embargo, una falta innecesaria de Carlota Velasco a Sabina Carli, propició que el Castelló dispusiese de tres tiros libres para situarse uno arriba (41-40).

A raíz de ese acontecimiento, el choque cambió radicalmente. El lenguaje corporal de uno y otro equipo eran las antípodas. Las castellonenses mostraron una actitud confiante, mientras que las herculinas todo lo contrario. Con todo, quedaban diez minutos y todo podía pasar.

Y así fue, ya que el acto definitivo arrancó de forma nefasta para el Maristas. No sólo encajó un parcial de 4-0, en el que Donajsa Terre se adueñó de la pintura, sino que los colegiados señalaron la cuarta falta de Vulovic.

Además de esta mala noticia, que provocó una bajada en el nivel de intensidad en defensa, se sumó el poco acierto en ataque de las herculinas, lo que complicó mucho las cosas (45-40).

Por suerte, Porri y Sendy acudieron nuevamente al rescate para dar un nuevo aire al equipo (45-44). Sin embargo, una inspirada Ana Pérez cortó de raíz esa remontada coruñesa y con tres buenas acciones ofensivas pondría un +6 para el Castelló (50-44).

Este golpe fue definitivo. Por mucho que lo intentaron, las jugadoras del Maristas no fueron capaces de atravesar la segunda mejor defensa de la Liga Femenina 2. Todas se frustaron cuando vieron que sus tiros, la mayoría liberados, no entraban. Mientras tanto, el Castelló, que tampoco estuvo fino en ataque en los instantes finales, logró sentenciar el partido con dos contraataques (55-44).

Ahora, el cuadro coruñés debe resetear la mente y pensar en el encuentro que disputará mañana contra el Miralvalle (11 horas).